En junio de 2023, un piloto de Delta fue detenido en el aeropuerto de Edimburgo tras una prueba de alcoholemia que sobrepasó los límites y por lo cual fue condenado a 10 meses de cárcel en una sentencia anunciada este martes.

Al parecer, el piloto levantó sospechas de los oficiales del aeropuerto cuando encontraron en su equipaje dos botellas de licor, más del líquido permitido en un vuelo. El comunicado del tribunal señaló que la sangre del capitán contenía 49 miligramos de alcohol por cada 100 mililitros de sangre, pues el límite legal es de 20 mg.

El 16 de junio de 2023, el piloto tenía que salir del aeropuerto de Edimburgo en un Boeing 767-300ER con rumbo al Aeropuerto Internacional John F. Kennedy (JFK) de Nueva York, pero el vuelo fue cancelado después de que el capitán fuera arrestado y puesto bajo custodia. El comunicado del tribunal decía que el diagnóstico del piloto era “trastorno grave por consumo de alcohol”.

Delta por su parte, apoyó al piloto, lo colocó en una licencia por incapacidad de larga duración y le pagó la mitad de su salario. Una vez cumpla la condena el piloto regresaría a trabajar con la aerolínea, aunque ya tiene 63 años y según la Administración Federal de Aviación (FAA) la edad de jubilación obligatoria para los pilotos es de 65 años.

Delta anunció que ralentizaría la contratación de pilotos para este año luego de las miles de contrataciones en 2023 cuando incorporó a 2.200. La aerolínea pretende agregar solo la mitad de las contrataciones del año anterior.